Château Pichon-Longueville Comtesse de Lalande 2020

Un vino tinto equilibrado y aromático de Pauillac

La propiedad

Segundo Grand Cru Classé de Pauillac, el magnífico Château Pichon-Longueville Comtesse de Lalande brilla en la denominación de Pauillac.

Fue en 1925 cuando la familia Miailhe, representada por Édouard y Louis Miailhe, adquirió esta propiedad en la orilla izquierda de Burdeos. Figura emblemática de la viticultura de Gironde, May-Eliane de Lencquesaing, hija de Edouard Miailhe, dirigió el Château Pichon-Longueville Comtesse de Lalande desde 1978 hasta 2007, cuando la propiedad fue adquirida por la familia Rouzaud, propietarios de la Casa de Champagne Louis Roederer.

El viñedo

Château Pichon-Longueville Comtesse de Lalande abarca 92 hectáreas, 72 de las cuales están en producción. Los suelos, compuestos por montículos de grava sobre subsuelos de arena-arcilla, benefician a las vides, que tienen una edad media de 30 años. Este gran viñedo de Pauillac se gestiona utilizando prácticas de viticultura sostenible, con prácticas biodinámicas en 32 hectáreas.

La añada

Mientras que el invierno suave favoreció una brotación temprana, los meses de abril y mayo fueron cálidos y marcados por lluvias muy intensas. Estas condiciones no afectaron a la floración, que fue temprana y rápida. Un junio fresco y bastante lluvioso fue seguido por un verano caliente y seco. Las lluvias de agosto fueron beneficiosas para la maduración y evitaron el estrés hídrico. Las uvas cosechadas son de muy alta calidad.

Vinificación y envejecimiento

Vinificación por parcelas. Encubado por gravedad. Depósitos troncocónicos de doble pared y termorregulados. Envejecimiento durante 12 meses en barricas (40% nuevas) con tostado medio largo. Trasiego tradicional a la luz de las velas.

Mezcla

Cabernet Sauvignon (77%)
Merlot (17%)
Cabernet Franc (6%).

Características y consejos de cata para Château Pichon-Longueville Comtesse de Lalande 2020

Cata

Nariz
Franca y de hermosa pureza, la nariz combina fragancias de mora, grosella negra y peonía con deliciosas notas de cedro típicas de la denominación.

Paladar
De hermosa elegancia, el paladar seduce con su perfecto equilibrio entre potencia, longitud, amplitud y un toque sabroso. Los sabores de grosella negra y mora envuelven el paladar, cuya estructura tánica cincelada combina precisión y sapidez con deleite.