Vassaltis, una pasión inquebrantable por los buenos vinos de Santorini
Yannis Valambous, un espíritu visionario y viñedos familiares
Los recuerdos de la infancia de Yannis Valambous le llevaron a la isla de Santorini, en Grecia. De niño, disfrutó de muchas vacaciones familiares allí, lugar donde su padre adquirió viñedos. Cuando heredó el viñedo de su padre, Yannis Valambous se propuso hacer realidad su sueño: insuflar nueva vida a esta prometedora tierra.
Objetivos vitivinícolas modernos respaldados por enólogos de talento
El objetivo de Yannis Valambous es simple y ambicioso a la vez: quiere transformar los viñedos de la familia en una bodega y una tienda de vanguardia, produciendo al mismo tiempo vinos exquisitos que muestren la calidad de las variedades de uva de Santorini. Este colosal proyecto se ha ido construyendo poco a poco a lo largo de los años y se ha logrado gracias a los talentosos y excepcionales enólogos Elias Roussakis y Yannis Papaeconomou, que se unieron con entusiasmo a la empresa para elaborar buenos vinos de Santorini.
De un proyecto personal a un objetivo compartido: elevar los vinos de Santorini a las alturas de los vinos finos
A los tres hombres les unía una visión compartida: demostrar que Santorini es capaz de producir vinos de alta calidad, al tiempo que demostraban que la nueva generación de viticultores griegos, gracias a sus habilidades y al dominio del arte de la elaboración del vino, puede contribuir a situar estos vinos en la escena internacional. Unos años más tarde, a base de trabajo y determinación, superaron con éxito el reto.
Un terruño típico griego
La geología de los suelos de Santorini: pobres en arcilla y ricos en minerales
Santorini es una isla volcánica, lo que crea condiciones favorables para el cultivo de Athiri, Aidani, Assyrtiko, Mavrotragano y Mandilaria, las principales variedades de uva de la infame isla de las Cícladas. En efecto, las sucesivas erupciones volcánicas a lo largo de los milenios han formado un suelo de textura única, compuesto por capas de ceniza volcánica, piedra pómez, arena y basalto.
Esta geología se caracteriza por su casi ausencia de materia orgánica, pero contiene altos niveles de minerales esenciales. Extremadamente beneficioso, el tipo de suelo ayuda a que las uvas conserven su acidez, esencial para la elaboración de vinos armoniosos en el clima mediterráneo de Santorini.
Un viñedo sano: los beneficios naturales del suelo de Santorini
La presencia de estos minerales especiales y la ausencia de arcilla en los suelos de Santorini dan lugar a uvas con un perfil de sabor distintivo y proporcionan un escudo natural contra las enfermedades. Las vides de bajo rendimiento de Santorini son una rareza en el mundo del vino porque están plantadas en el suelo con sus propias raíces, mientras que la mayoría de las vides del mundo están injertadas. Esto se explica por el hecho de que el suelo volcánico de Santorini es inhóspito para la filoxera, que ha diezmado las vides en casi todas las demás regiones vinícolas del mundo. Por ello, algunas de las vides de Santorini tienen más de un siglo de antigüedad.
El clima de Santorini, mediterráneo y desértico
El clima de la isla varía entre el calor mediterráneo y las condiciones típicas del desierto. Los inviernos son suaves, seguidos de primaveras cálidas y ventosas y veranos calurosos y secos. A lo largo del año, en Santorini llueve poco. Los chubascos que se producen en los viñedos son absorbidos rápidamente por el suelo rocoso y arenoso que constituye la mayor parte de la zona. No obstante, la mayor parte de la humedad que reciben las vides procede de las nieblas matinales, que ayudan a refrescar los viñedos. Los vientos del norte soplan durante toda la temporada de verano y ayudan a evitar el desarrollo de moho, lo que convierte a Santorini en un lugar ideal para la viticultura sostenible al tiempo que refresca las temperaturas.
Las variedades de uva típicas de Santorini componen los buenos vinos griegos de Vassaltis
Ya sean tintos o blancos, tranquilos o espumosos, los vinos de Santorini dejan boquiabiertos a los amantes de los buenos vinos por su carácter maravillosamente expresivo y complejo. Este carácter único se debe también a la riqueza de las variedades de uva cultivadas. La Assyrtiko es la variedad de uva más famosa de Santorini, pero hay muchas otras variedades autóctonas interesantes en la isla, varias de las cuales se cultivan en Vassaltis.
Assyrtiko: la variedad griega que produce vinos secos minerales o vinos dulces
La Assyrtiko es más famosa por los vinos secos, vibrantes y minerales que suele producir. La variedad también se utiliza en estilos más dulces, como el Vinsanto, el vino de postre más emblemático de Santorini.
Athíri: la variedad griega utilizada en los vinos blancos griegos de alta calidad
La Athíri es una de las variedades de uva más antiguas de Grecia. Aunque los amantes del vino fuera de Grecia pueden no estar familiarizados con ella, Athíri es una de las variedades blancas más plantadas en las islas del Egeo y en la Grecia continental.
Aidáni: la variedad griega perfecta para los vinos secos y semidulces delicados y florales
Al igual que la Athíri, la Aidáni es otra variedad histórica que se cultiva desde hace miles de años. Se suele mezclar con la Assyrtiko, que aporta al vino delicados aromas florales y suaviza la acidez aguda de esta variedad. Los bodegueros la utilizan para elaborar vinos secos y semidulces. Los mejores ejemplos envejecen entre tres y cinco años.
Mantilariá: la variedad griega ideal para vinos tintos coloridos y ligeros
En Santorini, esta variedad cubre alrededor del 17% de la superficie total de viñedos, lo que la convierte en la principal variedad tinta de Santorini. Aunque da un zumo muy coloreado, la Mantilariá ofrece vinos más bien ligeros.
Mavrotragano: la variedad griega que produce vinos finos, complejos y dignos de ser envejecidos
Aunque cubre menos del 2% de los viñedos de Santorini, la Mavrotragano merece ser destacada por ser una de las variedades de uva tinta más prometedoras de la isla. Ofrece vinos aromáticos con notas de frutas rojas maduras, especias, elementos minerales y una acidez crujiente y brillante. El potencial de envejecimiento de estos vinos supera los diez años.